Que estilo de Yoga Practicar?

YOGA es una disciplina, que como un arte al ser practicado con constancia y dedicación se perfeccióna. Este arte beneficia a las personas considerando las diferencias de edad, tipos de cuerpo, momentos de la vida (niñez, adultes, embarazo, pos parto, etc.), carácter, etc. 
Por eso, existen muchos tipos de YOGA, que aunque comparten sus objetivos generales de elevar la conciencia de las personas conectando y unificando su cuerpo, mente y espíritu; utilizan diferentes métodos para secuenciar sus clases, desarrollar los ejercicios de respiración, optimizar la salud del cuerpo y de la mente, etc.


En YOGART, nos hemos especializado en tres diferentes tipos de YOGA: YOGA Vinyasa Flow, HATA YOGA estilo SIVANANDA Y YOGA PRENATAL. Nosotros contamos con la certificaciones, la experiencia y la preparación adecuada para instruir y acompañar a las personas que se aventuran en la práctica de YOGA, con amor, compromiso y profesionalismo.

A continuación encontraras un detalle de estos YOGAS, para que conozcas mas sobre las clases y que puedes esperar de cada una.



a) YOGA Vinyasa Flow.

Este tipo de YOGA es una variante de HATA YOGA que es el product del encuentro de la cultura occidental con la cultura Hindu. Consiste en un aporte de las y los Yoguis occidentales que han retomado lo mejor de las técnicas del Hata Yoga, matizándolas con las necesidades e inquietudes propias de la cultura occidental.

En realidad esta es un clase de VINYASA BAKHTI YOGA FLOW, nombre que contraemos en YOGA FLOW por ser un termino corto y caracteristico.


La palabra Vinyasa significa "aliento movimiento sincronizado." En otras palabras, la maestro te dará instrucciones para pasar de una postura a la siguiente a través de la respiración, es decir, inhalar y exhalar. Esta técnica es a veces también llamado Vinyasa Flow, o simplemente de flujo debido a la forma en la que se desarrollan las posturas o Aasanas, en constante fluir o movimiento, hasta llegar a ser como una danza. La Palabra Bakhti significa “Devocional” y es que en esta clase, aunque no se profese ninguna religión o culto religioso, hay una inspiración espiritual que hace que en las clases se invoque la energía divina que habita en cada persona independientemente de sus creencias espirituales. Reconociendo que en cada una de las personas existe esa chispa de la Existencia Divina.



La practica.

Una clase de YOGA Flow se caracteriza por un momento inicial de centrado en donde a través del canto del mantra OM se sintonizan y conectan los canales energéticos o “Chacras”. Seguido de un momento de meditación para dedicar la sesión a algún aspecto particular de la vida de los participantes, invocando la energía de la Divinidad. Luego se realizan ejercicios de pranayama o “control de la energía vital a través de la respiración”. Estos ejercicios son básicos o avanzados, de acuerdo al nivel de la clase. Después se sigue una secuencia de estiramientos y torsiones secuenciadas con respiración.

También se realiza una secuencia de SURYA NAMASCAR o “Saludo al Sol”, que sirve como calentamiento corporal: lubricando coyunturas, alineando la espalda, tonificando los músculos, a la vez que consiste en una excelente práctica de sincronización de la respiración con el movimiento.

Después se pasa a las posturas o Aasanas de estabilidad, fuerza y balance que crean habilidades de enfoque, a la vez que potencian la stamina.



Durante la clase se incluyen también Aasanas de inversión que se realizan de acuerdo al nivel de la clase.

Antes de terminar la parte de posturas y movimiento, se da un espacio para dobleces de espalda y estiramientos intensos.

Finalmente, la clase concluye con un momento de relajación que incluye una meditación guiada. Promoviendo a través de este espacio que el cuerpo pueda asimilar las diferentes estimulaciones glandulares y los beneficios del proceso de respiración que se a experimentado.



Al concluir una sesión de una hora y quince minutos de clase de YOGA flow, el participante puede esperar haber sudado mucho, sentirse más ligero, estirado, con el cuerpo tonificado. Con el espíritu tranquilo, relajado y en paz.





b) Sivananda Yoga en las Clases de  Hata YOGA.

Sivananda Yoga es un enfoque clásico y holístico al Hatha Yoga de que estira y tonifica el cuerpo entero. También es un sistema completo de sanación diseñado para ayudar al cuerpo a mantener un estado natural de salud.

La instrucción de YOGA Sivananda gira alrededor de frecuente relajación, y acentúa respiración yoguica completa. Por lo que constituye la base de nuestras clases de HATA YOGA.

El Hata Yoga se centra en la relajación del cuerpo en posturas de descanso, proporcionando al cuerpo una oportunidad para renovar energías y sanarse.

Innumerables estudios han demostrado los beneficios físicos y emocionales de este tipo de YOGA. De allí que, los efectos y beneficios de la restauración que proporciona el yoga no deben ser subestimados. Aunque parezca suave y lento, el cuerpo, la mente y el espíritu trabajan fuerte en cada postura.



El HATA YOGA, como otras formas de yoga, ayudan a activar el sistema nervioso parasimpático también conocido como el SNP. El SNP se encarga de equilibrar el cuerpo y de dar la respuesta corporal y mental de equilibrio y descanso. Respuestas necesarias en los procesos de sueño, recuperación de enfermedades, superación del estrés, etc.



Estimular el SNP, contribuye a reducir la frecuencia cardíaca, disminuyendo la presión arterial, ayudando a estimular el sistema inmunológico y manteniendo el sistema endocrino en funcionamiento sano. Cuando este sistema se sale de control, o cuando el sistema nervioso simpático, SNS es sobre-estimulado, el SNP ayuda a traer todo de nuevo en equilibrio.

Por eso, las acciones que estimulan la relajación, como yoga y meditación, que a la vez, ayudan a estimular el SNP son en general beneficiosas para la salud total del cuerpo, la mente y el espíritu.

La práctica

Una sesión típica comienza con cada practicante descansando en Savasana, tensionando y destensionando el cuerpo.

Luego se realizan ejercicios de Pranayama o “Control de la energía vital a través de la respiración”. Estos ejercicios pueden ser Kapalabhati y Anuloma Viloma. Después de realizar ejercicios de estiramiento y lubricación de las coyunturas se desarrollan rondas de Surya Namaskar. Posteriormente se ejecuta el programa estándar de 12 asanas básicos del sistema Sivananda.

Se ha elegido desarrollar la práctica de Sivananda YOGA en la clase de YOGA RESTAURATIVO, pues este establece el equilibrio fisiológico en el cuerpo y asegura el porte mental por su serie científicamente diseñada de asanas (posturas de yoga) y pranayama (técnicas de respiración).

Una clase típica de Sivananda Yoga envuelve 12 posturas básicas que buscan incrementar fortaleza y flexibilidad, respiración apropiada, y facilitar la meditación. Aunque este es un programa tradicional, este se sigue flexiblemente por la profesora, permitiendo algunas variaciones. Así, la profesora agrega variaciones y posturas, cuando el nivel de habilidad de los estudiantes aumenta.

Por eso, la profesora monitorea de cerca el progreso de los estudiantes y frecuentemente los asiste con las posturas.

Al finalizar una sesión de una hora y quince minutos de YOGA RESTORATIVO las personas pueden esperar sentirse: relajadas, en paz, con su mente y su cuerpo bien oxigenados y con una sensación general de bienestar.

c) YOGA PRENATAL.

El hecho más importante de una práctica regular de yoga prenatal es que esto puede ayudar a las mujeres llegar a través de su embarazo con las mínimas molestias, ya que funciona de una forma mental, espiritual y física proporcionando a la madre un sentido de empoderamiento, con una actitud amorosa y positiva. También ayuda al nacimiento y las etapas posteriores al parto, debido a que:

- Yoga integra la respiración y los movimientos del cuerpo, proporcionando una mayor conciencia de la conexión entre el bebé y la madre.

- El yoga ayuda a desarrollar fuerza y resistencia, al mismo tiempo que da una vívida percepción de sí mismo para reconocer los cambios corporales.

- El yoga aumenta la energía y la flexibilidad, lo que ayuda a las madres a prepararse para partos más cortos.

- Yoga aporta una profunda sensación de relajación, reduciendo el estrés y llevar un sentido de cuerpo y apertura mental.

- El yoga promueve una mejor circulación ayudando a revive algunas de las molestias relacionadas con el aumento de la presión arterial.

- El yoga ayuda a llevar una buena alineación de la columna vertebral por lo que la madre será más consciente y se preparan para mantener una postura correcta eliminación de algunas de las molestias relacionadas con la presión que el bebé va a traer a la columna vertebral.

- Yoga une su cuerpo, mente y espíritu. El yoga puede conectar a la madre a su bebé también! La práctica del yoga proporciona a la madre la oportunidad de crear un mundo (su cuerpo) para su bebé es sano y pacífico.



"Lo que un niño aprende en el útero no se puede aprender en la tierra" (Yogui Bhajan).

Una de las buenas razones por las que a una mamá embarazada le gustaría practicar yoga prenatal es que ella en su clase puede encontrar comunidad y complicidad mientras que el proceso de su embarazo tiene lugar en su vida. Este espacio proporciona un momento diseñado especialmente, para que las mamas tengan la oportunidad de compartir y tener "retroalimentación" de su propia experiencia. En la clase también pueden recibir algunos consejos "que le ayudará a volver a vivir y liberarse de algunos malestares del proceso. También tendrá la oportunidad de explorar su cuerpo, en una práctica de yoga que le dará posiciones que le ayudarán a sobrellevar el dolor y podrá estirarse de una forma segura y confortable. Tener la comodidad de una práctica diseñada para sus necesidades muy específicas en una manera segura y saludable de ejercitarse, relajarse y disfrutar de esta etapa.

La Practica.

La clase se realiza en un hora y cuarto aproximadamente. Al inicio se hace un momento de relajación para que las mamas y sus bebes puedan establecer con conciencia esta conexión corporal, mental y espiritual que los une. Luego se realizan ejercicios suaves de pranayama o “control de la energía vital a través de la respiración”. Seguido, se trabajan estiramientos confortables de cuello, espalda y brazos. Trabajando también las aéreas de los brazos y las muñecas, fortaleciéndolas y lubricándolas. Las caderas y las piernas es otra de las areas que se trabaja durante la clase, a través de posturas adecuadas a cada etapa del embarazo y al tamaño del bebé. Se cuenta con una sección dedicada a desarrollar posturas que desarrollan resistencia y fuerza, sin forzar o cansar a la madre. La clase continúa con estiramientos suaves de espalda y el área pélvica, lugares del cuerpo en donde se deposita mucha tensión por las posturas y el peso del bebé. Finalmente, la clase concluye con una meditación guiada a través de la cual, las madres visualizan a sus bebes y tienen la oportunidad de establecer una conexión consiente que va más allá de lo físico, trascendiendo hacia la conexión energética.

Al finalizar una clase de YOGA PRENATAL, las madres pueden esperar sentirse relajadas, ligeras, tonificadas y con una sensación general de armonía y paz.